lunes, 30 de junio de 2014

P.T.



Tú que quieres ir al otro lado, tú que quieres cruzar la puerta: ¿sabes acaso lo que hay más allá de la Piedra Terrestre? ¿No te detendrás por miedo ante el umbral de un mundo insignificante?

Lo que buscas es espacio abierto, deseas la eterna libertad de los ígneos espíritus, pero estás encadenado. Sí, eres todavía una pobre bestia del pantano. Anda, pregúntale a tu maestro, él te dirá que el vuelo para siempre te lo impide el maldito reloj de sangre.

Lucharás como un demonio astuto para estar en el ojo del huracán. En un principio serás ciego a las señales, apenas distinguirás tu mente de tu corazón. Cuánto tiempo perdido, neófito, pero cuánto tiempo ganado en sembrar la única semilla posible, la semilla negra, la de los pecados capitales.

Ponte de pie y se presente con esa dignidad que es un brillo solar nunca visto por los ojos. Abandona el desprecio de la Piedra Terrestre y empieza a pulir. Si el arcángel te asiste encontrarás un zafiro. Hay otras piedras preciosas ocultas en la gran masa, pero tan profundas que su extracción pudiera provocar un sismo de tamaña magnitud.

Quédate así en el ojo del huracán. En un principio, dominar el viento y calmar la tormenta. ¿Entiendes por qué digo en un principio? Abre los ojos y utiliza la doble corriente. Abre tu cuerpo y utiliza la doble corriente. No sigas aquí la señal de agua, ni de río, ni de mar, ni de lluvia. Debes dominar aquí el viento antes del amanecer.


Llegarás al otro lado cuando la semilla negra entregue frutos blancos. Nunca olvides la metodología del calendario y aprende a calcular los tiempos con certera precisión. Cuando tengas los frutos, entrégalos, dónalos, no dejes ninguno para ti. Tú sólo te quedarás con un sol de mediodía y una felicidad inquebrantable. Tendrás para ti las manos de Dios. ¿Y qué más podrías desear en esta vida?

miércoles, 25 de junio de 2014

EL LIBRO NEGRO

Cuando el discípulo comienza a observarse de manera seria, inevitablemente debe llevar el Libro Negro, en donde quedarán registrados los peores aspectos de su mundo interno, los más inhóspitos paisajes de su pensamiento, los peores impulsos de su instinto animal y básico, todo lo que produzca vergüenza, repulsión, asco, tensión nerviosa, ganas de suicidarse, vómitos, enfermedades, es decir, lo peor de la raza humana, el infierno psíquico, todo lo que uno quisiera hacer desaparecer, lo que uno nunca es capaz de admitir abiertamente.

El discípulo nunca podrá decir que se conoce realmente si no sabe leer en el Libro Negro.

El Libro Negro es el verdadero basural del alma, un depósito de muerte, hediondo, asqueroso, inhabitable, que nunca desaparecerá completamente, porque no es posible limpiarlo del todo.


Con respecto a este asunto, es necesario precisar que el avance del discípulo se produce siempre hacia arriba y hacia abajo, simultáneamente. Mientras más abajo llegue en el estudio de sus defectos, más arriba podrá llegar en el de sus virtudes.

sábado, 21 de junio de 2014

EL SILENCIO MENTAL




Muchos piensan que el silencio de la mente es dejar la mente en blanco a voluntad, pero en realidad no es así. La mente sólo puede estar en blanco cuando está muerto el cerebro.

Si buscáramos una metáfora para graficar los que significa el silencio mental, diríamos que es comparable a un lienzo sobre el que un artista quiere pintar, o a una hoja en blanco sobre la que un poeta quiere escribir.

Me refiero a que la mente en silencio es el estado previo a la producción o recepción de pensamientos voluntarios, pensamientos de alta calidad, y se obtiene cuando el practicante logra silenciar su diálogo interno y desechar, mediante una técnica especial, todos los pensamientos automáticos y toda la estática de los pensamientos, la que es comparable a la contaminación acústica que impide el normal transcurso de una pieza musical cualquiera.

El silencio de la mente es un estado de calma que inunda todo el organismo, principalmente el sistema nervioso. Un estado que es absolutamente contrario a la idea de hacer un esfuerzo, porque los esfuerzos producen inevitablemente una tensión nerviosa. Lo que se necesita es voluntad y energía disponible para lograr ese estado de calma.

Puede parecer contradictorio el hecho de que no se necesite hacer un esfuerzo para lograr el estado de silencio mental y al mismo tiempo requerir de energía disponible, pero la verdad es que relajarse completamente consume mayor cantidad de energía que la necesaria para tensar todos los músculos.

Una persona muy cansada no logra nunca una total relajación, a menos que aplique voluntad y posea ciertas reservas de energía psíquica.


El silencio mental es el portal del otro mundo, portal que sólo un hombre iluminado logra atravesar. Para alcanzar la iluminación hay que dominar el silencio de la mente. Y para dominar el silencio de la mente hay que ser dueño absoluto de cada uno de los sentidos y alimentarse de todas las impresiones a través de la respiración.

lunes, 16 de junio de 2014

LA MUERTE DEL ALMA




El fuego astral se extingue cuando los espejos interiores cambian el ángulo en que reflejan la luz del sol. Se produce entonces una confusión de rayos entrelazados que golpean fuera de las zonas predeterminadas, quemando así todo brote vegetal y estropeando en pocos días el trabajo de años.

Si no se rectifica oportunamente la posición de los espejos, la quemazón de los brotes deja la tierra completamente árida, transformándola en un verdadero desierto que por las noches se congela y en el día se abrasa, y que va matando de a poco toda partícula de vitalidad.

Después sucede que largas horas de viento polar siembran esa amargura tan característica de las personas sin afecto, y cuando esa semilla negra se multiplica, la raíz del alma sufre una violencia que la deja sin visión astral de manera permanente, y el hombre prisionero de esta alma zombi no es capaz de despertar ya nunca más a la vida interior.


Quien vea con pavor que sus espejos no reflejan según el orden natural, debe trabajar el color verde con urgencia, hasta retornar toda humedad en el fondo psíquico, humedad que, de no rectificar el ángulo de los espejos con ayuda de herramientas específicas, volverá a sufrir el proceso de calcinación y ya no será posible rescatar nada de la materia original. El cuerpo sigue vivo, desde luego, pero el alma se muere irremediablemente.

viernes, 13 de junio de 2014

SUEÑOS



Los sueños son la brújula que sirve al mago para saber si el conocimiento y el poder adquirido son reales y permanentes.

El hombre bien despierto recuerda todos sus sueños porque se mantiene conciente mientras duerme. Con el tiempo se dará cuenta de que los sueños son eventos reales.

Los sueños pueden ser utilizados para obtener información a distancia, para aprender acerca de uno mismo y también de otras personas, para espiar a alguien, y es sabido incluso que se pueden hacer maldades bastante peligrosas.

Aprender a dominar los sueños requiere una mente despierta. (Hay que hacer esfuerzos para despertar.) Es muy real la paradoja de seguir despiertos aún cuando estamos dormidos.

En los sueños puede también el Iniciado encontrar respuestas sobre aquello que es su materia de estudio, puede obtener símbolos personales, palabras de poder, predicciones de todo tipo y también acceso a bloques de conocimiento directo.

Con los sueños también se puede jugar, pero no es recomendable hacerlo.

Los sueños como trabajo

En los sueños el hombre debe construir sus cuerpos sutiles cazando energía y almacenándola en un lugar seguro y sin fugas.

Condición previa, controlar la respiración y mantener todos los músculos en una muy baja y perfectamente equilibrada tensión. Bajar el flujo de los pensamientos y elevar la frecuencia mental al máximo.

Con el tiempo irá aumentando la energía radiante del hombre. Sus sueños se harán cada vez más reales. Luego su realidad se hará cada vez menos objetiva. Su centro de gravedad equilibrará en la balanza el peso de sus sueños con el de su realidad. Finalmente la visión subjetiva se hace absoluta y el hombre toma posesión de su espíritu.

miércoles, 11 de junio de 2014

ORGONITAS ETÉRICAS



Construye las orgonitas etéricas utilizando los materiales extraídos de tu yacimiento astral. Cable de cobre no muy grueso, cuyo origen sea solamente Venus, dispuesto en forma de espiral, junto con virutas de hierro, aluminio y otros metales, excepto el plomo.

Cualquier residuo de plomo que haya en el dispositivo debe ser sublimado inmediatamente.

Coloca en medio de esta rica mezcla mineral un buen trozo de cuarzo, el que puedes elaborar a fuego lento con arena fósil humedecida.

Para dejar que tu orgonita etérea irradie hacia el exterior, ponla siempre a la altura del pecho, de manera que los orgones se proyecten junto con las pulsaciones cardíacas.

Posiciona la imagen holográfica de tu orgonita siempre en ángulo geométrico. Tus cuerpos sutiles serán succionados por la carga mineral del dispositivo y purificados por el cristal de cuarzo.

Nunca desenfoques tu mente, y repite la operación hasta que te encuentres saturado de energía orgónica viva.


Proyecta este artefacto etérico en el tiempo. Utiliza tus cuerpos sutiles como palanca, y olvídate para siempre de la enfermedad.