lunes, 16 de junio de 2014

LA MUERTE DEL ALMA




El fuego astral se extingue cuando los espejos interiores cambian el ángulo en que reflejan la luz del sol. Se produce entonces una confusión de rayos entrelazados que golpean fuera de las zonas predeterminadas, quemando así todo brote vegetal y estropeando en pocos días el trabajo de años.

Si no se rectifica oportunamente la posición de los espejos, la quemazón de los brotes deja la tierra completamente árida, transformándola en un verdadero desierto que por las noches se congela y en el día se abrasa, y que va matando de a poco toda partícula de vitalidad.

Después sucede que largas horas de viento polar siembran esa amargura tan característica de las personas sin afecto, y cuando esa semilla negra se multiplica, la raíz del alma sufre una violencia que la deja sin visión astral de manera permanente, y el hombre prisionero de esta alma zombi no es capaz de despertar ya nunca más a la vida interior.


Quien vea con pavor que sus espejos no reflejan según el orden natural, debe trabajar el color verde con urgencia, hasta retornar toda humedad en el fondo psíquico, humedad que, de no rectificar el ángulo de los espejos con ayuda de herramientas específicas, volverá a sufrir el proceso de calcinación y ya no será posible rescatar nada de la materia original. El cuerpo sigue vivo, desde luego, pero el alma se muere irremediablemente.

viernes, 13 de junio de 2014

SUEÑOS



Los sueños son la brújula que sirve al mago para saber si el conocimiento y el poder adquirido son reales y permanentes.

El hombre bien despierto recuerda todos sus sueños porque se mantiene conciente mientras duerme. Con el tiempo se dará cuenta de que los sueños son eventos reales.

Los sueños pueden ser utilizados para obtener información a distancia, para aprender acerca de uno mismo y también de otras personas, para espiar a alguien, y es sabido incluso que se pueden hacer maldades bastante peligrosas.

Aprender a dominar los sueños requiere una mente despierta. (Hay que hacer esfuerzos para despertar.) Es muy real la paradoja de seguir despiertos aún cuando estamos dormidos.

En los sueños puede también el Iniciado encontrar respuestas sobre aquello que es su materia de estudio, puede obtener símbolos personales, palabras de poder, predicciones de todo tipo y también acceso a bloques de conocimiento directo.

Con los sueños también se puede jugar, pero no es recomendable hacerlo.

Los sueños como trabajo

En los sueños el hombre debe construir sus cuerpos sutiles cazando energía y almacenándola en un lugar seguro y sin fugas.

Condición previa, controlar la respiración y mantener todos los músculos en una muy baja y perfectamente equilibrada tensión. Bajar el flujo de los pensamientos y elevar la frecuencia mental al máximo.

Con el tiempo irá aumentando la energía radiante del hombre. Sus sueños se harán cada vez más reales. Luego su realidad se hará cada vez menos objetiva. Su centro de gravedad equilibrará en la balanza el peso de sus sueños con el de su realidad. Finalmente la visión subjetiva se hace absoluta y el hombre toma posesión de su espíritu.

miércoles, 11 de junio de 2014

ORGONITAS ETÉRICAS



Construye las orgonitas etéricas utilizando los materiales extraídos de tu yacimiento astral. Cable de cobre no muy grueso, cuyo origen sea solamente Venus, dispuesto en forma de espiral, junto con virutas de hierro, aluminio y otros metales, excepto el plomo.

Cualquier residuo de plomo que haya en el dispositivo debe ser sublimado inmediatamente.

Coloca en medio de esta rica mezcla mineral un buen trozo de cuarzo, el que puedes elaborar a fuego lento con arena fósil humedecida.

Para dejar que tu orgonita etérea irradie hacia el exterior, ponla siempre a la altura del pecho, de manera que los orgones se proyecten junto con las pulsaciones cardíacas.

Posiciona la imagen holográfica de tu orgonita siempre en ángulo geométrico. Tus cuerpos sutiles serán succionados por la carga mineral del dispositivo y purificados por el cristal de cuarzo.

Nunca desenfoques tu mente, y repite la operación hasta que te encuentres saturado de energía orgónica viva.


Proyecta este artefacto etérico en el tiempo. Utiliza tus cuerpos sutiles como palanca, y olvídate para siempre de la enfermedad.

sábado, 7 de junio de 2014

TODO ESTÁ CREADO




Todo lo que uno es, todo lo que uno sabe, piensa y siente, viene de afuera. Nada se crea dentro del ser humano, el cerebro solamente transmite información. Sus ideas, sean buenas o malas, no le pertenecen.

Porque todo pertenece a Dios. El Universo ya está completo y no hay nada que se pueda agregar a él.

Los inventos nuevos que el ser humano se atribuye solamente son aplicaciones de leyes y conocimientos que siempre han existido, tal como la electricidad y el fuego existían antes de que el hombre los descubriera y se sirviera de ellos para facilitarse la vida.

El genio, por lo tanto, sólo tiene la capacidad de poseer una mente abierta, receptiva y absorbente de los conocimientos que aún permanecen ocultos para el hombre.

Estas mentes brillantes no se limitaron al mero funcionamiento cerebral, sino que lograron triangular una energía mucho más potente y elevada.

Lo mismo sucede con los poderes del Iniciado. Él conquista estos raros poderes, (que por lo demás se encuentran latentes en todos los hombres y mujeres de la Tierra,) gracias a su esmerado trabajo alquímico, pero estos poderes no le pertenecen, son parte de la naturaleza. De ahí vienen y ahí volverán.

La soberbia y el orgullo que siente la humanidad en su ignorancia, vanagloriándose de la aparente grandeza de su civilización, no tiene una base real, ya que sus conquistas son ilusorias. El real progreso del hombre y de la sociedad es producto del arduo trabajo de hombres excepcionales, héroes espirituales cuya existencia se desenvolvió muy por encima del hombre normal, y que estuvieron siempre guiados, conciente o inconcientemente, por seres superiores que han permanecido en las sombras, invisibles, vigilando el progreso interno del hombre, así como su crecimiento espiritual.


El conocimiento es análogo a la materia, es decir, existe una cantidad limitada y nada se puede agregar a lo que se encuentra disponible en el Universo, cantidad que se encuentra sin utilizar en su gran mayoría. (G. Gurdjieff) 

miércoles, 4 de junio de 2014

TOTALIDAD




Si la humanidad en su conjunto es importante, tú como individuo no eres importante. Si la humanidad está destinada a perdurar, tú estas destinado a desaparecer. El mundo nos necesita a todos, pero si uno de nosotros falta, el mundo no nos echará de menos.

Sin embargo, si mueres antes de morir y despiertas antes de llegar a viejo, el mundo te pondrá por encima de la humanidad y tu destino será otro.

Si el rebaño comienza a despreciarte, alégrate, la naturaleza terrestre tiende a luchar contra los magos. Tu peor humillación es ser sólo un hombre aquí en este planeta. Acéptalo con humildad, pero aprende a mirarlo todo desde gran altura. Utiliza el enorme poder de tu insignificancia. Tu cuerpo puede ser pisoteado mientras tú sigues arriba en el sitio de los que son más que hombres.

Entonces, encarna la humanidad en su conjunto y empújala, pero hazlo en secreto. A nadie le gusta que le tiren agua fría cuando está durmiendo.

Tú eres el futuro de la raza humana, eres un gran adelantado, pero aún así estás destinado a desaparecer. El cuerpo es apenas un paso temporal. El recipiente de greda sirve para iniciar el trabajo, pero no es el verdadero recipiente. Tu cuerpo terrestre nunca será capaz de resistir el contacto directo con el fuego. ¿Acaso crees ser distinto del resto de los mortales? No lo eres. Las diferencias se harán evidentes después de esta vida material.


Recuerda que la materia alcanza su perfección en el vaso hermético, no en el de barro, y recuerda que el fuego verdadero viene siempre de arriba, y que aquí abajo sólo puedes ver la sombra de un color. Si despiertas llegas al color blanco. Si amas llegas al color rojo. Pero si despierto amas a la humanidad y despierto trabajas para ella, tendrás la verdadera piedra filosofal. Entonces serás sólido como una roca y nada podrá entristecerte, porque la medicina del espíritu estará siempre en tu corazón.